BIENVENIDOS 

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Estas líneas van dirigidas a todos aquellos familiares y/o acudientes que tienen un adulto mayor y que se encuentran en la difícil situación de tener que llevar a sus seres queridos a un Centro de Bienestar de Adulto Mayor (CBA). En ocasiones esta situación se torna dolorosa.

A veces nos encontramos en la situación que nuestro adulto mayor este ingresado en el hospital y cuando le dan de alta no pueda regresar a su casa; que su demencia cada día va en aumento, también que debido a sus enfermedades su grado dependencia este es cada vez mayor en tan solo un breve periodo de tiempo.

Permanentemente escuchamos algunas frases como estas:

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-¡Cómo voy a llevar a mi madre a un Centro de Bienestar!

-¡Estoy trabajando y no puedo atenderlo como se merece!

-Vive solo y su alzheimer esta cada día más avanzado, deja abierta la puerta, se olvida de tomar sus medicamentos, a veces creo que no come bien, no se baña…

-Mi padre no quiere salir de su casa.

-¡Lo encontré desmayado  en su casa!

- Soy la única persona que lo cuida, no tengo tiempo para mí, estoy agotada…

-Hasta hace una semana era completamente independiente, pero ahora no sabemos que vamos hacer, hay que darle de comer, llevarlo al baño, en fin, estas y muchas más situaciones las encontramos a diario con las personas que buscan de nuestro servicio.

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Hay que añadir que esta decisión hay que tomarla por lo general de una forma precipitada debido a las circunstancias. Esta situación suele ocasionar que la familia se sienta culpable, que piensen que abandonan al adulto mayor. Desasosiego, miedo, angustia e inseguridad son sentimientos comunes y normales.

Tanto los días previos al ingreso como los de adaptación al Centro de Bienestar son difíciles para ambos, pero una vez depositada la confianza en el equipo de profesionales y al ver que el adulto mayor se encuentra bien y recibe atenciones que en casa hubiesen sido imposibles, estos sentimientos se van mitigando.

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En el HOGAR GERIÁTRICO Y DEL ADULTO MAYOR JUAN PABLO II llevamos más de 7 años trabajando con adultos mayores y en nuestro día a día vivimos de primera mano estas situaciones, por eso hemos hecho de nuestros Centro de Bienestar, un lugar donde nuestro adulto mayor pueda sentirse como en casa, con personas a su servicio que les proporcionan las atenciones y cuidados que ellos necesitan.

Queremos conseguir la confianza y satisfacción de todos nuestros Residentes y la tranquilidad de sus familiares al saber que están en buenas manos.